Viaje a Malasia: continuación del segundo día

Después del mercado fuimos a visitar el centro de las rosas. Cerca de dicho centro encontramos un pequeño templo dedicado a la religión tradicional china, que no Budismo aunque también podría incluirse el Budismo dentro de ese grupo de prácticas.

El edificio en la siguiente foto es el centro de las rosas, una especie de jardín botánico abierto al público en el que hay todo tipo de plantas. Y poco público. La verdad es que prácticamente estábamos solos allí.

Luego fuimos a Brinchang para ir al "Valle de los Cactus", otra granja más... Al menos no fuimos a la granja de los tomates, que también está disponible para su entretenimiento.

Para ir al valle de los cactus pasamos por esta zona que en España se definiría de chabolas.

Cactus y más cactus.

Otras fotos tomadas jugando con la función de macro de la cámara...

Luego fuimos al pueblo a cenar. El resto del grupo tenía la idea de probar el steam boat (barco de vapor) del lugar, que se suponía famoso. Yo, como no me iba a poner en contra de 11 personas de Hong Kong (a ver si me salían al estilo Jackie Chan) y como no tenía ni idea de que era eso, pues los seguí.
Las tres ollas tienen un hornillo debajo, conectado a una bombona de gas, y contienen diferentes tipos de caldo. La de color anaranjado tenía caldo picante y las otras clado de vegetales. Luego, están todos los platos alrededor con comida cruda, que ha de ponerse dentro del caldo hirviendo y esperar a que se cocine. ¿Cuánto tiempo hay que esperar? Ni idea, ellos sabían calcularlo... Lo que hace el estar acostumbrado. Había comida de todo tipo: pollo, vegetales, setas, pescado, tofú, una especie de gambas... Luego, con el cucharón se retira lo que hayas metido dentro. No apto para personas que no gusten de sorpresas culinarias.

De vuelta al hotel y a planear el día siguiente, que ya salíamos hacia Kuala Lumpur.